En 1580 Michel de Montaigne publicó sus Essais creando así una nueva categoría literaria. Desde entonces este subgénero narrativo ha mantenido sus dos rasgos principales, subjetividad del escritor y voluntad de estilo. Por su variedad temática los ensayos se han dividido en múltiples tipos, histórico, político, científico, literario, etcétera. En sus comienzos fueron textos breves, pero ahora predominan los extensos. En los últimos años algunos filólogos historiadores y científicos han publicado ensayos divulgativos que son un extracto de sus tesis doctorales o tratados más profundos. La intención de salir del reducido ámbito académico y comunicar con el gran público parece loable, pero no siempre el resultado es satisfactorio, porque pasar de un lenguaje erudito a la sencillez narrativa no está al alcance de todos los autores.